En nuestro día a día, constantemente tomamos decisiones, desde elegir qué desayunar hasta definir estrategias en grandes empresas; pero, ¿alguna vez te has detenido a pensar en cómo tomas esas decisiones.?
Existen distintos modelos de toma de decisiones que nos ayudan a comprender y mejorar este proceso, cada modelo ofrece una perspectiva única para analizar y abordar situaciones, considerando distintos factores.
Entender estos modelos no sólo es vital para líderes y profesionales, sino para cualquiera que busque tomar decisiones informadas y efectivas en su vida.
Conozcamos 11 tipos de modelos de toma de decisiones, y cómo influyen a la hora de decidir.
¿Qué es los modelos de toma de decisiones?
Los modelos de toma de decisiones son un marco conceptual o una serie de pasos que proporcionan una estructura sistemática para abordar y resolver problemas o tomar decisiones.
Estos están diseñados para ayudar a las personas a pensar de manera más clara y estructurada sobre las decisiones que deben tomar, permitiéndoles considerar todas las opciones y sus posibles consecuencias.
Enrique Yacuzz (2007), plantea que “Como las buenas teorías, los buenos modelos explican, predicen y deleitan”. Un modelo explica por qué y cómo se toma una decisión, predice aproximadamente el resultado de ella y, eventualmente, deleita a quienes lo conocen y utilizan. Los modelos de decisión, además, son un mapa para orientar el trabajo individual y de los grupos;” (pág.5).
Básicamente, estos modelos representan diferentes enfoques, y dependiendo de la situación y el contexto, las personas y las organizaciones pueden llegar a utilizar una combinación de varios modelos.
11 Tipos de modelos de toma de decisiones
Existen distintos modelos de toma de decisiones que se han desarrollado a lo largo del tiempo para ayudar a las personas y organizaciones a tomar decisiones más efectivas, algunos de estos modelos son:
1. Modelo racional
El modelo racional de toma de decisiones se basa en un proceso lógico y estructurado, parte del principio de que el decisor tiene toda la información necesaria y busca la mejor solución posible, inicia identificando el problema, recopilando datos, generando alternativas, evaluando estas opciones, y finalmente seleccionando la más óptima.
Aunque este modelo representa el ideal de decisión, en la práctica, factores como la limitación de tiempo e información pueden hacer difícil su aplicación estricta; sin embargo, proporciona una base sólida y sistemática para abordar decisiones complejas.
2. Modelo Bounded Rationality (Racionalidad Limitada)
El modelo de Racionalidad Limitada, propuesto por Herbert Simon, sostiene que la toma de decisiones en ocasiones está limitada por la información disponible, la capacidad cognitiva y el tiempo disponible; es decir, las personas no siempre pueden considerar y evaluar todas las alternativas posibles para llegar a una decisión óptima, debido a estas restricciones.
Por ello, se utilizan o atajos mentales para simplificar el proceso de decisión, aunque puede llevar a decisiones rápidas, también es susceptible a sesgos y errores. Este modelo ofrece una perspectiva más realista y humana sobre cómo realmente tomamos decisiones en escenarios complejos.
3. Modelo intuitivo
El modelo intuitivo de toma de decisiones enfatiza el papel de la intuición, experiencias previas y percepciones subjetivas, en lugar de depender de un análisis detallado, las decisiones se basan en corazonadas o sensaciones.
Este enfoque es particularmente útil en situaciones de alta incertidumbre o cuando la información es ambigua; aunque puede ser visto como menos estructurado, la intuición es producto de experiencias acumuladas y patrones reconocidos inconscientemente. Sin embargo, este modelo también puede ser vulnerable a sesgos personales y errores cognitivos, por lo que su uso debe ser equilibrado con enfoques más analíticos.
4. Modelo incremental
El modelo incremental de toma de decisiones sostiene que las decisiones se toman en pequeños pasos sucesivos, más que a través de grandes saltos o transformaciones, contrario a la búsqueda de soluciones óptimas, este modelo se enfoca en ajustes modestos a políticas o acciones existentes.
Es particularmente relevante en contextos políticos o burocráticos donde cambios radicales son difíciles de implementar. En esencia, el enfoque incremental acepta que en muchas situaciones es más viable y pragmático hacer mejoras graduales, dada la complejidad y la incertidumbre de ciertos entornos decisionales.
5. Modelo de zona de aceptación
El modelo de “zona de aceptación” se centra en un rango predefinido de soluciones que son consideradas aceptables para el decisor o grupo decisor; en lugar de buscar la opción óptima, se evalúa si una decisión cae dentro de esta zona predeterminada; si es así, se acepta; si no, se rechaza.
Este enfoque reconoce que, en muchos contextos, especialmente organizacionales, no todas las decisiones necesitan ser óptimas, sino simplemente aceptables para avanzar. La clave es definir previamente qué es “aceptable”, facilitando un proceso decisivo más ágil y pragmático.
6. Modelo de análisis prospectivo
El modelo de análisis prospectivo, derivado de la Teoría de la Perspectiva de Kahneman y Tversky, examina cómo las personas evalúan potenciales pérdidas y ganancias al tomar decisiones; ya que, las personas no siempre actúan racionalmente; su percepción del riesgo varía según si se enfrentan a una posible ganancia o pérdida.
Este modelo sugiere que somos más aversos a las pérdidas que atraídos por ganancias equivalentes. Además, las decisiones se ven influenciadas por cómo se presentan las opciones, lo que puede llevar a preferencias inconsistentes y, a veces, irracionales.
7. Modelo de análisis retrospectivo
El modelo de análisis retrospectivo de toma de decisiones se centra en evaluar decisiones pasadas para informar las actuales. En lugar de anticipar consecuencias futuras, se mira hacia atrás para entender las causas y efectos de decisiones previas.
Esta reflexión posterior permite identificar lecciones aprendidas y patrones de éxito o fracaso. Aunque es valioso para comprender el impacto de acciones pasadas, este modelo puede ser susceptible a sesgos de confirmación, donde se buscan datos que justifiquen la decisión tomada. Es esencial balancear esta retrospección con enfoques prospectivos para decisiones más holísticas.
8. Modelo Garbage Can (Bote de Basura)
El modelo “Garbage Can” (Bote de Basura) de toma de decisiones, propuesto por Cohen, March y Olsen, describe la toma de decisiones en organizaciones como un proceso caótico y ambiguo, en lugar de un proceso lineal y lógico, decisiones, problemas, soluciones y participantes que interactúan de manera aleatoria; en este “bote”, se mezclan diferentes elementos y, a veces, coinciden para producir decisiones.
Es especialmente aplicable en organizaciones con objetivos ambiguos o en situaciones de alta incertidumbre, dado que captura la naturaleza no estructurada y oportunista de muchas decisiones organizacionales.
9. Modelo político
El modelo político de toma de decisiones percibe la decisión como resultado de influencias, poder y negociaciones entre diferentes actores o grupos; En lugar de un proceso puramente racional o sistemático, las decisiones se forman a través de la interacción de diferentes intereses y agendas. Las coaliciones, la influencia y la negociación desempeñan un papel central.
Es especialmente relevante en entornos donde múltiples partes interesadas con diferentes objetivos y recursos de poder coexisten, de este modelo destaca que, en muchas organizaciones y gobiernos, la toma de decisiones es inherentemente política y conflictiva.
10. Modelo basada en Heurísticas
El modelo basado en heurísticas se refiere al uso de atajos mentales o reglas simples para tomar decisiones rápidamente en entornos complejos, originado de los estudios de Kahneman y Tversky, sugiere que, ante la sobrecarga de información y limitaciones cognitivas, las personas frecuentemente recurren a heurísticas.
Aunque estas facilitan decisiones rápidas, también pueden introducir sesgos y errores sistemáticos. Por ejemplo, la “heurística de disponibilidad” impulsa decisiones basadas en información recientemente recordada, mientras que la “heurística de representatividad” se enfoca en similitudes aparentes; estas heurísticas ilustran cómo nuestra mente simplifica complejidades, a veces a expensas de precisión.
11. Modelo de proceso creativo
El modelo de proceso creativo en la toma de decisiones destaca la importancia de la innovación y la generación de ideas novedosas, a diferencia de modelos más lineales, este se enfoca en etapas como la preparación, incubación, iluminación y verificación.
El proceso comienza con la acumulación de información, seguido por un periodo de reflexión subconsciente, luego, surge una revelación o idea innovadora, que finalmente se evalúa y refina. Este enfoque reconoce que las soluciones óptimas a veces requieren pensar “fuera de la caja” y valora la intuición y la inspiración en la toma de decisiones.
Referencias Bibliográficas:
Enrique Yacuzz. UN PANORAMA DE LOS MODELOS DE DECISIÓN. Universidad del CEMA. Av. Córdoba 374, C1054AAP Buenos Aires, Argentina, ISSN 1668-4575 (impreso), ISSN 1668-4583 (en línea) Editor: Jorge M. Streb; asistente editorial: Valeria Dowding [email protected].