La oferta privada, es un término usado en los mercados financieros, para hacer referencia a aquellas ofertas en el mercado de valores, como acciones, bonos, u otros; y que no están abiertas al público en general para que estos oferten por ellas; en cambio, son ofertas dirigidas a un grupo selecto de inversores.
En este sentido, solo ese pequeño grupo de inversores estos invitados a participar en dicha oferta privada, de esta manera el emisor de la oferta busca captar ciertos perfiles que considere potenciales inversores, y que pudieran generar mayor valor para sus compañías e inversiones.
Además, por su carácter privado, los requisitos de registro legal de estas ofertas son menos estrictos en comparación a los requisitos exigidos en una oferta púbica.
Para comprender mejor de que se tratan una oferta privada, definamos su concepto, elementos clave, y algunos ejemplos prácticos.
¿Qué es una oferta Privada?
Una oferta privada son aquellas ofertas en las que un emisor de instrumentos financieros de inversión, realiza una oferta dirigida únicamente a un pequeño y selecto grupo de potenciales inversores, por ende, la opción de compra no está disponible para el resto de inversores en el mercado, como sucede en la oferta pública y no se emplean medios masivos de difusión de publicidad.
La cantidad de inversores a participar en esta oferta por lo general no debe exceder de unos 50 inversores, aunque la cantidad de participantes se puede ver sujeta a las regulaciones del mercado de la nación en el cual se lleve a cabo, ya que algunas legislaciones pueden establecer números más reducidos de participantes, de lo contrario será tratada y regulada como una oferta pública.
Este tipo de ofertas privadas se realizan con el fin de atraer con prioridad a determinado grupo de inversores, como algunas compañías e inversionistas institucionales que pudieran estar interesados, antes de realizar una oferta de los instrumentos financieros a un público generalizado mediante ofertas públicas; pero, de quedar instrumentos sin vender, estas pueden ser incluidas en una oferta pública.
Sin embargo, algunas compañías pueden realizar ofertas privadas posteriores a una oferta pública, cuando estas emiten nuevos instrumentos, por ejemplo, nuevas acciones.
Elementos de una Oferta Privada
Es importante tomar en cuenta que, aunque una oferta privada está sujeta a menos regulaciones de registro, estas deben reunir ciertos elementos para que puedan ser consideras como tal, los cuales pueden varias según la legislación del país en el cual se emite, siendo algunos de estos elementos los siguientes:
Protección: A fin de brindar una protección al inversor, estas deben estar dirigidas a inversores sofisticados, con una buena base de conocimiento del tipo de inversión que se le oferta, de lo contrario la oferta no podrá ser privada sino pública.
Acceso a información: Por muy sofisticados que sean el grupo de inversores a invitar, el emisor debe igualmente brindárseles la información necesaria a todos los recetores de la oferta por igual, para que puedan tomar buenas decisiones de inversión.
Número de receptores de la oferta: El número de receptores participantes en la oferta privada debe ser bastante reducido, el cual puede variar según las regulaciones de la nación donde se emita la oferta, pues un número considerable de invitados a participar en la oferta, será tomado en cuenta como una oferta pública, y por ende la exigencia del cumplimiento del registro correspondiente como tal.
Apariencia de oferta publica: Aun cuando se trate de una oferta privada, la negociación funciona de manera similar a una oferta pública, con un precio de oferta, dispersión de receptores de la oferta, formas y medios para la realización de la oferta.
No obstante, la legislación de cada país puede establecer otras condiciones, por ejemplo, las empresas por sociedades anónimas abiertas locales o sus filiales no pueden realizar ofertas privadas.
Ejemplos de Oferta Privada
La oferta privada en el mercado financiero de valores, tal como se expone anteriormente, va dirigida a un selecto grupo de inversores que pudieran estar interesados, en este sentido podemos apreciar los siguientes ejemplos:
- Las ofertas privadas de acciones, pero que únicamente van dirigidas a un grupo de inversores, en este caso compañías del mismo ramo industrial, con experiencia y conocimiento del comportamiento del sector en el mercado, siendo estos inversores sofisticados que pudieran estar interesados en dichas acciones.
- Las Ofertas privadas en las que la compañía emisora emite acciones por suscripción únicamente dirigida a sus accionistas o gerentes de alto nivel, como un incentivo que les brinda la posibilidad de comprar acciones a un valor preferencial.
- Las ofertas privadas de bonos de deuda emitidos por una compañía que busca captar financiamiento de determinados inversionistas, instituciones, como algunos bancos, y sociedades financieras.
- La oferta privada de bonos emitidos por una compañía cuya oferta está únicamente dirigida a un pequeño grupo de socios comerciales que pudieran estar interesados en invertir en dicha compañía.
