Decidir empezar con un nuevo negocio es un proceso bastante difícil, tanto por la complejidad que representa como por lo laborioso que puede resultar. Existen varios factores para tener en cuenta al crear una empresa nueva que resultan sumamente importantes para que los resultados sean óptimos.
Es normal, por la inexperiencia, que ciertos aspectos se descuiden durante la creación de una empresa, mientras concentramos nuestra atención en otros que realmente no resultan tan relevantes al principio.
Al momento de crear tu propia empresa es necesario que tengas en cuenta ciertos puntos clave, los cuales vamos a explicarte a continuación en este post.
¿Qué tener en cuenta al crear una empresa nueva?
Todo proyecto empresarial parte de una idea simple que poco a poco va formándose hasta convertirse en un emprendimiento viable e incluso sólido, pero es importante conocer los factores mas importantes al crear un negocio.
Es normal cometer algunos errores al inicio, sin embargo, estos riesgos pueden disminuirse en gran medida si se tienen en cuenta los aspectos de mayor importancia, se siguen los pasos en el orden adecuado y se distinguen los puntos de mayor importancia de aquellos que no requieren de tanta atención.
A continuación de diremos qué debes tener en cuenta al crear una empresa nueva, en el orden correcto para que los resultados iniciales sean los más favorables.
Analizar las mejores opciones de negocios
Cuando se quiere iniciar un emprendimiento surgen muchas ideas de negocio, pero no todas pueden ser logradas por ello, es necesario basar las mejores opciones en los números. Si bien algunas ideas pueden dar mejores resultados en menor tiempo, requieren de una inversión capital bastante elevada.
Tus habilidades, y las de los otros asociados, tienen un papel muy importante en esta decisión, no importa si son naturales, simples conocimientos básicos o a causa de estudios, lo indispensable es que se trate de un sector que conozcan a profundidad.
Crear un plan de negocio
Una vez que se tome la decisión sobre el campo que abarcará dicho emprendimiento es importante crear un plan de negocio para comenzar. Este debe establecer en un esquema cuales son los objetivos y las posibilidades de lograrlos.
Es necesario fijar metas a corto y largo plazo, hacer un análisis del presupuesto necesario, cuánto dinero neto se posee, cuanto espacio se necesita para comenzar y estrategias de venta.
Hacer un análisis DAFO puede ser de mucha utilidad para determinar las fortalezas y debilidades del negocio.
Aquí entran en juego varios factores adicionales:
- Posibilidades financieras: este punto suele dejarse de lado hasta el final, pero es el más importante. Basándose en el capital con el que cuentas debes realizar cada una de las decisiones del plan de negocios.
- Analizar a la competencia: las empresas y negocios con los cuales vas a competir en el sector escogido juegan un papel bastante importante en la decisión final. La calidad de sus productos, los precios que ofrecen y sus estrategias de venta pueden ser la causa del éxito o el fracaso de tu propio negocio.
Tener un equipo comprometido
Contar con un buen equipo de trabajo es esencial para el éxito de un proyecto de negocio, y no solo se trata de los empleados, los inversionistas y socios también deben estar comprometidos en la empresa y los logros para que las condiciones sean optimas.
Esto te va a permitir delegar funciones y actividades dentro del negocio teniendo la certeza de que se realizaran correctamente. La definición de estas debe ser destinadas a personas responsables.
Enfocarse en un solo tipo de cliente
Aunque el mercado es muy amplio, destinar y enfocar tu negocio en un mismo tipo de cliente es un factor clave para conseguir el éxito de forma rápida y fácil. De esta forma las publicidades, la atención dada y los productos serán simples de definir.
Todos los negocios necesitan un estudio de mercado basando en el sector donde se maneja, esto sirve para atraer a un tipo de clientes que se puedan satisfacer con los productos que ofreces, creando estrategias que funcionen la mayor parte del tiempo.
Las estrategias de venta son importantes, pero no funcionan del mismo modo para todos, el trato personalizado para cada cliente es fundamental para volverlo un comprador que desee volver y que pueda recomendar tu negocio.
Publicidad y marketing
Contar con expertos en marketing puede ser de gran ayuda, pero al comenzar no se cuenta con suficiente presupuesto para ello, pero esto no significa que sea imposible crear estrategias de publicidad simples pero efectivas.
Existen ciertas inversiones en marketing que resultan económicas y pueden generar buenos resultados como las redes sociales, Google Adwords o servicios de linkbuilding. Son completamente funcionales sin importar el tipo de producto que ofrezcas, incluyendo aquellos que son pocos conocidos y que requieren de un push comunicativo bastante fuerte.
Crear una web corporativa para dar seriedad a tus actividades es elemental.
Trámites legales
Muchas veces nos olvidamos de que la creación de un negocio requiere de una base legal, por ello es necesaria la creación de un documento donde se estipulen las cláusulas especificando términos y condiciones dentro de la empresa.
Estos deben ser destinados a cada una de las partes implicadas en la empresa, desde los empleados hasta los inversionistas, incluyéndote como líder de esta.
Actitud personal y plan alternativo
Tener un plan alternativo no implica que estés pensando en un fracaso inminente antes de comenzar con el primer proyecto, simplemente es una forma de asegurarte de no perder toda la inversión financiera.
Por otro lado, la actitud personal que tengas debe ser siempre positiva, pero al mismo tiempo precavida. Aunque es importante que pienses que las cosas se pueden dar y que lograras las metas, debes tomar decisiones adecuadas, y dar un paso atrás si llega a ser necesario en algunos aspectos.
Una vez que tengas todas las decisiones tomadas, el plan de negocio realizado y hayas tenido en cuenta cada uno de los factores para crear una empresa nueva que te hemos mencionado en este post, podrás iniciar los pasos uno a uno hasta conseguir las primeras metas a corto plazo que te has propuesto.
