En uno de los artículos que hemos publicado en las últimas semanas hacíamos mención a la historia y origen de una herramienta tan importante como el Diagrama de Gantt, lo cierto es que esta historia no ha venido como un mero transcurso del tiempo, sino que a lo largo de los años el Diagrama o Carta Gantt ha sufrido modificaciones y mejoras que lo han vuelto, si cabe, una mejor herramienta para la gestión de proyectos.
En la actualidad y más de un siglo después de que la Carta Gantt viera la luz, esta sigue siendo una fantástica manera de gestionar proyectos, trabajos o desarrollos individuales y colectivos.
Existen algunas herramientas online como GanttPRO que facilitan la creación de cartas de Gantts.
En este artículo precisamente, queremos mencionar algunos de los aspectos de dicha utilidad conociendo de primera mano que es lo que ha hecho que esta carta siga en vigor tantas décadas después de su nacimiento e incluso se haya adaptado a la era digital mediante la aparición de programas destinados a su confección.

La utilidad de la Carta Gantt
En concreto, y en la gestión de toda clase de proyectos, la carta Gantt es básica para planificar y conocer de primera mano cuales van a ser las tareas que se van a realizar en un período concreto de tiempo. La ventaja que aporta la Carta Gantt es esencial ya que nos ofrece una rápida visualización de las diferentes acciones a realizar, facilitando en sobremedida la gestión y seguimiento del desarrollo de cada una de las tareas a realizar.
Además, al funcionar como un calendario con un extra de información la Carta Gantt aporta otra ventaja esencial, la de poder medir temporalmente si el desarrollo y gestión de los diferentes trabajos o actividades a realizar está siendo el adecuado, permitiendo en cualquier caso, modificar los parámetros temporales a fin de conseguir que los mismos se adapten a la realidad del proyecto.
Por poner un ejemplo, en el caso de que el diagrama de Gantt esté siendo utilizada por un inversionista que busca marcar la necesidad de productos ante un determinado proveedor, podremos marcar en diferentes renglones las múltiples tareas a realizar, por ejemplo las actividades a nivel de importación, los trámites ante la hacienda, o la gestión de los diferentes presupuestos, asignando a cada una de estas tareas un marco temporal diferente que nos sirva como medida del éxito o fracaso de cada uno de los pilares del proyecto.
Y para terminar de entender la utilidad de la Carta Gantt en la gestión de un proyecto determinado, nada mejor que conocer en un primer momento como se trabaja sin una herramienta de este tipo. Las empresas que no utilizan herramientas de gestión como esta carta tienden a realizar un trabajo más desordenado, y por consiguiente más ineficaz. El resultado no es otro que una gestión más ineficaz y lo que supone es un mayor gasto de recursos humanos y materiales para conseguir un resultado equivalente.
La Carta Gantt es sólo una de las maneras para gestionar proyectos, pero lo cierto es que debido a su sencillez y facilidad de uso, es siempre una gran manera de conseguir resultados.